El título de este volumen es especialmente fiel a su contenido. Por un lado, están los consejos que podrían considerarse de orden moral o ético, engarzados a menudo con consideraciones sobre la naturaleza humana, así como con las costumbres y las convenciones de su tiempo, en los que Girolamo se muestra a veces un tanto irónico y con un poso de amargura. Por otro lado, hay una serie de opiniones muy personales sobre los pilares de la sociedad y sobre algunos aspectos de la misma, en las que se muestra más divertido. Tanto en un caso como en otro, sin embargo, la pericia en el juego verbal, la originalidad en la expresión y la precisión léxica convierten cada una de las sentencias en aforismos de una calidad literaria espléndida.

El sevillano Francisco Socas es sin duda el mayor especialista español en este autor, y su selección de textos, hecha a partir del conjunto completo de su obra, ha tenido en cuenta tanto el ingenio de Cardano como su brillantez literaria, lo que da como resultado un libro que supone un modo idóneo de descubrir a un escritor de una inteligencia y una precisión sorprendentes.

Aquí os dejamos algunos ejemplos:

• «Juzgad al sabio por sus obras, no por sus palabras; en cambio, al necio por cualquiera de las dos»
• «¡Qué despropósito, qué locura en una vida tan corta como la nuestra no ponerse nunca a vivir!»
• «Daos prisa despacio, esto es, pensadlo mucho y obrad rápido»
• «Censurar a alguien con nombre y apellidos y desafiarlo con insultos sólo entre filólogos se puede consentir»