Goethe fue, en palabras de George Elliot, «el más grande hombre de letras alemán... y el último verdadero hombre universal que caminó sobre la tierra».
Nos legó obras fundamentales del saber y la literatura mundial y, en ellas, sentencias inolvidables. Es éste un compendio de las mejores, por temas y libros, escogidas por Juan José del Solar. Valga una muestra de su pensamiento y certeza:
Una colección de anécdotas y máximas será el mayor de los tesoros para el hombre de mundo que sepa intercalar las primeras en el lugar adecuado durante una conversación y recordar las segundas en el momento oportuno.
Goethe, el notable poeta, dramaturgo y ensayista alemán, sintetiza en esta obra la esencia de su pensamiento, que lo convirtió en una de las figuras intelectuales más influyentes de la Europa de los tiempos de la Revolución francesa y las primeras décadas del siglo XIX. El presente volumen se basa en la edición canónica alemana publicada en Weimar en 1907, preparada por Max Hecker, quien recopiló y ordenó todo el material cronológicamente. Estas máximas condensan el pensamiento del Goethe más ilustrado y nos acercan al Goethe hombre.
Es una de las máximas figuras de la literatura alemana, aunque su obra ocupa un lugar señero en la cultura europea. De espíritu universal, estadista y erudito, estuvo abierto a todas las innovaciones y a todas las formas de pensamiento. Goethe nunca publicó máximas y reflexiones en vida como tales, sino que aparecieron en revistas y se incluyeron parcialmente en Las afinidades electivas y en Los años de peregrinaje de Guillermo Miester. Al morir Goethe, sus secretarios, Eckermann y Rienner, publicaron parte del legado póstumo con el título de Sentencias en prosa.
Fue uno de los traductores del alemán más reconocidos y laureados de nuestro país. Ha traducido al español obras de, entre otros, Goethe, Thomas Mann, Kafka, Hermann Hesse, Bertolt Brecht, Elias Canetti, Günter Grass, Robert Walser y Joseph Roth.
Recibió el Premio Nacional de Traducción de España al conjunto de su obra, otorgado por el Ministerio de Cultura en 2004 y en el y también recibió el Premio Nacional a la Mejor Traducción en 1995 por la traducción de la obra Historia del Doctor Johan Fausto. Por último también recibiría el Premio de traducción de la Fundación Hesse en Alemania en 2004, aunque no fue el único premio de traducción que recibió, anteriormente también lo habían premiado e Austria.
Falleció en Peú en 2014, aquejado de una enfermedad que lo obligó a estar en silla de ruedas los últimos años de su vida, pero esto no impidió que continuara traduciendo obras hasta el final.